viernes, 23 de abril de 2010

..::TE AMO::.. por Ammel Rodrigo.



                                      Personajes: Maximino 70 años
                                                            Lupita        59 años
                                                            Maximino 27  años
                                                            Lupita        16  años

(El actor desde el inicio se mezclará entre el público. Visiblemente borracho, desaliñado. Aparenta estar drogado. Tienen que incomodar al público. A una primera señal, el actor subirá al escenario para bailar sin ritmo una pseudo-canción que el mismo interprete. Caerá dormido. A una segunda señal, el actor se levantará para continuar con el anterior baile hasta llevarlo a su máxima consecuencia en cuanto a movimiento y sonido corporal, incluida la voz. Una danza tribal y delirante provista de sonidos guturales hasta que el cansancio del actor dé paso al personaje. se sienta en proscenio centro. Respira y recomienza un canto musitado ahora. Reconociendo su cuerpo, desconociendo su estado, manos, piernas. Articulaciones anquilosadas, respiración forzada. Mira al público. Un abuelo cariñoso mirando a su nieto. Ahora es Maximino. Sólo lleva consigo una bolsa de papel con una concha -pan de dulce- de vainilla y una ánfora. Viste como pordiosero envuelto en una cobija)
 
Maximino -70 años-: Ah! cuánto achaque, cuánto pinche achaque!... pero no siempre fue así... dónde me perdí, dónde me quedé. (ve a su padre en el patio de butacas, lo llama, lo invita a sentarse en proscenio a su lado. En el otro extremo divisa a su hermano, hace lo mismo con él. Retoma. A sus parientes invisibles.) Miren en lo que me convertí, pero no siempre fue así verdad! Yo fui joven, alto, tenía ánimo... era alegre!. Estaba fuerte, pues si trabajaba en el tranvía cómo no iba a estar fuerte (ríe) me iba a bailar todos los fines de semana allá a "los ángeles" porque quien no conoce "los ángeles"... (se convida al público a terminar la frase. En caso que no suceda, Maximino se indignará y concluirá la frase como quién enseña una gran lección) ... no conoce México! Eso! (ríe. Utilizando mímica llanamente) Me compraba mis lociones, mi aceite para el cabello "del de bebé señorita por favor" y me iba contento a bailar cada fin de semana, cada fin... bueno hasta que la conocí... aquí... en... en.. (desorientado señala para varios lugares. Se pregunta al público la ubicación de la alameda.) ...en la alameda. Desde que la vi me enamoré de ella... estaba sentadita tan bonita, con su vestido, su cabello largo, negro. Toda tan preciosa. Me fui acercando poco a poquito (de bulto) y cuando menos se dio cuenta... zas! ya estaba sentado al lado de ella: "Maximino del Valle "Y" de la Torre y es usted una mujer muy chula. Ay! qué cara puso... espantada creo, pero ya luego fue iluminando su carita con una sonrisa... cuánto piropo tan bonito. qué bonita sonrisa! y la dejó ahí hasta el último día. Nunca tuvimos hijos y lo intentamos harto! pero pues... nunca se pudo. Titipuchal de exámenes, médicos... chingo de estudios... y al final el malo era yo, el que no podía tener hijos era yo! que "el contéo" que "el esperma" chingue a su madre el conteo y el esperma! pues claro que el malo era yo, si ella era perfecta... perfecta como esa tardecita en la alameda. Total que el que no podía tener hijos era yo... (de forma idéntica) Total que el que no podía tener hijos era yo... Total que el que no podía tener hijos era yo. (El actor va descomponiendo a Maximino de 70 años para ir dar paso, lentamente a Lupita de 59. Miradas, movimientos).

Lupita -59 años- Me lo decía todo el tiempo. "Y tu puedes tener hijos?" "no seas bruto si ni operada estoy!" pero creo que nunca me entendió el muy zonzote. (Pausa, coquetea con el público) Siempre, he sido así. Desde muy chiquita. La primera vez que me maquille... no había nadie en casa y me fui corriendo al cuarto de mi mamá, directo al cajón donde guardaba sus cosméticos (Saboreando la palabra) cos-mé-ti-cos!!! Un poco de rubor, sombras, bilé y su tizne negro... parecía yo payaso! pero frente al espejo no veía tal, frente al espejo veía a una hermosa princesa! una princesa que llegó a conocer a muchos hombres... tantos! tan guapos y varoniles todos! (mordiendo una concha -pan de dulce- de vainilla) Había uno que siempre venía muy trajeado y relamido, muy bien lustrado. Trabajaba aquí pasando la alameda y siempre se quejaba de todo. Yo creo que era un huevón, sí era un huevón. (se toma un trago de tequila de su ánfora) Olía tan rico... a brandi y a cigarro! Lo único que sé es que tenía una esposa y una hija y eso porque se le salió un día que llegó..."pasado de copas"... la última vez que lo vi. Otro que conocí era un taquero de jalisco, alto, guapo, fornido... un toro! El día que lo conocí me había vestido desde muy temprano con una ropa que me prestó mi prima "la trompeta" (sube las piernas a proscenio, las acaricia. coquetea) Recuerdo que me fui corriendo a una cantina de Garibaldi y ahí me quedé sentadita en una mesa de la esquina. En cuanto entro yo lo vi, y él claro que vio que yo lo vi! ha luego me saludo alzando su cerveza. Bajé la mirada. Lugo se paró a poner música en la sinfonola. (Recorriendo con la mirada al talegón) y por fin se acercó...
      "... quisiera ser la golondrina que al amanecer, a tu ventana llega para ver a través del cristal y despertarte muy dulcemente si aún estas dormida a la alborada de una nueva vida plena en amor..."
      Platicamos toda la noche... ojos,  labios, oreja, cachetes, buche, nana... tacos de guisado, de todo vendía allí afuera de la basílica. Me divertía mucho con él aunque lo vi poco. Y no, nunca nadie me amó. Pero eso nunca me importó, nunca busqué eso. Ahora a esta edad mi alma sigue teniendo hambre de hombre, aunque mi cuerpo dice "ya no más, ya no más!"

Transición. La juventud. el sueño.

Maximino, 27 años: (nervioso) Lupita, quiero decirte que desde el día en que te conocí, cuando te vi el otro día aquí sentada en la alameda no he podido dejar de pensar en ti. desde que me dejaste tomar tu mano y caminar contigo, no he pensado en otra cosa más que en ti. Quiero decirte que si me correspondes quiero estar contigo el resto de mi vida. quiero trabajar para ti siempre. Quiero crecer y que tu crezcas conmigo. Admirarte y que me admires. Quiero estar contigo.

Lupita, 16 años: (Sorprendida mas que conmovida) Desde hace tiempo que yo me he sentido atraída por hombres... no. por caballeros como usted.

Maximino, 27 años: (acariciando su tobillo) es usted una dama.

Lupita, 16 años: (retirando la mano) es usted un caballero.

Maximino, 27 años: (acariciando su rostro) Me gusta tu sonrisa, tu piel, me gusta tu cabello, tu voz... me gustan tus ojos!

Lupita, 16 años: (acariciando su rostro) Me gustan tus manos, tu color, me gusta tu altura, tu fuerza... me gustan tus ojos 
 
Se besan.

Maximino, 27 años: Te amo!

Lupita, 16 años: Te amo! Pensé que moriría sola, abandonada. Que me iría secando poco a poco en las sombras de esta ciudad tan grande. (Viendo al público incomodado en un principio por su presencia) que a todos les daría asco, que solo recibiría insultos y olvido... y henos aquí los dos juntos ahora. vestidos como para una hermosa cena-baile!

(Entra track musical. El actor baila combinando personajes y edades. Invita al público a bailar, unos momentos y se va.)

                                                                                FIN

Adaptación libre por Ammel Rodrigo de "El cuerpo pide ya no más" de Ramón Hernández. México D.F. Febrero 2010. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario